Autobiografía

 

Mi autobiografía💫

Un miércoles 28 de marzo del 2001 en la alcaldía Azcapotzalco, La señora María Eugenia Oliver Hernández dio a luz a una bebé medio llorona, esa fui yo; no éramos ricos ni tampoco pobres, pero nací en una clínica del Instituto Mexicano Del Seguro Social (IMSS). En mis primeros años de vida, mi mamá tenía un buen trabajo dentro una empresa que nos permitía vivir cómodamente sin que nada faltara en casa, y mi papá también trabajaba mucho como taxista para ayudarla.

Mientras papá y mamá trabajan me dejaban en una guardería igualmente perteneciente al IMSS, después papá me recogía y esperábamos a mi mamá en la casa, eso hasta que crecí un poco y tuve que empezar a ir a la escuela. A los tres años mis papás decidieron separarse, ya no funcionaban bien juntos y creo que fue la mejor decisión para mi bienestar hasta ahora, justo a esa edad llego el momento y entre al Instituto Pascual Borgia de Celamex Italia, una escuela de monjas privada, muy bonita y chiquita, pero que tiene mis mejores y más divertidos recuerdos, ahí cursé el preescolar y mi educación primaria.

Cuando pase a la secundaria todo cambio, fue de los más grandes cambios que he pasado en mi vida, entre a la Escuela Secundaria No. 121 Rabindranath Tagore, claramente una escuela de gobierno, papá y mamá ya no tenían tantos recursos para que yo siguiera estudiando en escuelas privadas, los primeros meses fue muy complicado para mí, pero con el tiempo me acostumbre a mi nuevo entorno.

Como la mayoría de las niñas tuve la fiesta de XV años que tanto quise, entre mis papás, amigos y mi abuela paterna cooperaron para lograrlo, fue muy lindo y me divertí bastante.

A los 15 años, entre al Cecyt. 2 “Miguel Bernard” del Instituto Politécnico Nacional, la mejor etapa de toda mi escolaridad, aprendí muchísimas cosas y conocí gente que ha marcado mi vida, estudié Diseño Gráfico Digital como carrera técnica, y aunque me costo un poco salir de ahí lo logre, nunca pensé que una escuela de fisicomatemáticas me iba a gustar tanto y que me serviría en la actualidad.

Hace unos años, en 2019 trabajé por primera vez, estaba solo por aprobar mi última materia para poder salir de la vocacional y tenía mucho tiempo libre, así que decidí ocupar mejor mi tiempo y ayudar con los gastos en mi casa, trabajé en una empresa pequeña de investigación de mercados enfocada en algunos países sudamericanos, me gustaba mi trabajo, mantenía contacto con gente de otros países y aprendí mucho, pero tuve que dejarlo por continuar estudiando.

En septiembre de 2020, aunque estuviéramos en pandemia por el Covid-19, comencé a estudiar la licenciatura en Relaciones Comerciales en la Escuela Superior de Comercio del Instituto Politécnico Nacional, aún sigo cursándola, pero me encanta mi carrera, he aprendido muchas cosas que no imaginaba, mi carrera técnica me ha ayudado bastante, y las matemáticas se han hecho un poco más fácil gracias a la vocacional. Trabaje un tiempo entre el 2021 y principios del 2023 en un centro de atención telefónica de Citibanamex, me desarrolle en muchos aspectos, me enseño a ser más abierta, autodidacta y mucho más responsable, incluso adquirí algunos conocimientos financieros.

Aunque sigo en proceso de ser una licenciada sé que falta muy poco para lograrlo, y faltan muchos logros más en mi vida, mamá y muchos más pueden pensar que mi terquedad y ser caprichosa es malo, pero nada me va a detener hasta lograr lo que quiero. Al finalizar mi licenciatura quiero estudiar una maestría en Administración y Políticas Públicas, tengo un raro interés en temas gubernamentales y políticos, pero me encanta y quiero aprender muchas cosas más. Espero poder encontrar un buen trabajo en una empresa que me permita solventar mis gastos, trabajar tanto como sea posible en lo que me gusta y no tener que preocuparme por cuanto gastar en viajar mucho, y por supuesto, no dejar de aprender nunca, así como formar una familia con tres hijos.